Niños y niñas, ¡Bienvenidos al circo!
Sorprendidos nos quedamos cuando recibimos la visita una simpática payasa, llamada Fofita.
Ella despertó nuestra curiosidad por adentrarnos en el mundo del circo e investigar sobre sus personajes y su estilo de vida.
Nos pusimos manos a la obra y junto con las familias transformamos las clases en coloridas carpas de circo, donde cada personaje mostraba sus habilidades.
Nuestros ojos se abrieron de par en par y en la boca se nos dibujó una inocente y nerviosa sonrisa al entrar en las clases decoradas con vivos colores, recreando carpas circenses y personajes en plena función de sus actividades.
¿Sabíamos algo del circo? ¡Si! y corriendo hicimos una lluvia de ideas.
Cada lunes un grupo de niños/as diferentes, abríamos la asamblea con una exposición sobre los personajes y profesiones del circo. Al final una lluvia de aplausos era el reconocimiento del trabajo bien hecho.
Colores vivos y alegres han sido protagonistas en libros, trabajos, etc, donde hemos ido reflejando lo aprendido sobre los personajes, sus actividades y modos de vida.
En el rincón del circo caminamos sobre una cuerda, hacemos malabares y hasta entonamos el abracadabra con chistera en mano. Mientras tanto, otros hacen cola delante de la taquilla para comprar su entrada y no quedarse sin silla.
¡Nada por aquí, nada por allá! Pasamos un rato muy divertido con los juegos de magia que nos mostró el mago Miguel, fue fascinante observar los trucos a partir de sus palabras mágicas ¡Gugali, Gugali!
Todas estas actividades han estado enfocadas al aprendizaje de diferentes y numerosos contenidos sobre el circo. Con todo ello también nos hemos divertido investigando sobre los personajes y escenificando números circenses.
¡¡¡ESTO HA SIDO TODO AMIGOS!!!
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